[dropcap]U[/dropcap]n simple sufijo puede marcar un mundo de diferencia. La terminación «esco» o «esca» distingue lo cristiano de lo cristianesco y marca la diferencia entre lo correcto y lo incorrecto, la vida y la muerte, cielo e infierno. No hay nada mejor para tu bienestar espiritual que estar en una iglesia cristiana. No hay nada peor para tu bienestar espiritual que estar en una iglesia cristianesca. Estas son algunas características de cada una. Una iglesia cristiana enseña la Biblia. Está comprometida con la inerrancia, la suficiencia, la claridad, y la autoridad de la Palabra de Dios y por lo tanto la predica semana a semana con confianza y constancia. Una iglesia cristianesca enseña acerca de la Biblia. Está comprometida a impartir lecciones de vida y usa la Escritura como punto de partida para enseñar a las personas a vivir vidas de éxito y realización. Una iglesia cristiana admite la profunda depravación de los seres humanos. Reconoce que todos tenemos un profundo desorden de manera que ninguno de nosotros posee ni la más mínima justicia para defenderse delante de Dios. Una iglesia cristianesca proclama la inherente bondad de la humanidad. Reconoce que no somos lo que podríamos y deberíamos ser, pero nos incentiva a creer que con suficiente esfuerzo podemos llegar allí. Una iglesia cristiana tiene como declaración central la obra consumada de Cristo. La buena noticia de la gracia nos libera de la tarea imposible de ganarnos nuestra salvación y en lugar de ello simplemente recibe lo que Cristo ya ha conseguido. Una iglesia cristianesca tiene como declaración central la obra inconclusa de la humanidad. La mala noticia de las obras se convierte en el camino áspero e imposible para impresionar a Dios con actos que llamen su atención y ganen su favor. Una iglesia cristiana proclama la muerte sustitutiva de Jesucristo. Creyendo que nuestro pecado ha provocado la justa ira de Dios, declara con asombro que el Hijo de Dios tomó voluntariamente nuestro pecado sobre sí mismo y absorbió toda la furia de la ira del Padre. Una iglesia cristianesca proclama el amor sin ira de Dios y la vida ejemplar de Jesucristo, presentando a Cristo como el ejemplo último de lo que un ser humano puede y debe ser. Una iglesia cristiana predica el evangelio de justificación solo por gracia, mediante la sola fe, solo en Cristo. Llama a las personas a que se arrepientan de sus pecados y se vuelvan a Jesucristo en busca de perdón. Una iglesia cristianesca predica un evangelio de justicia social o prosperidad personal. Llama a las personas a reparar los males sociales o a proclamar enriquecimiento financiero, a arrepentirse solo de la acción insuficiente o de la fe insuficiente. Una iglesia cristiana se reúne cada semana a adorar al Dios de la Biblia en conformidad con la Biblia. Conociendo su urgente necesidad de sabiduría divina, leen la Biblia, predican la Biblia, oran la Biblia, cantan la Biblia, y tienen comunión en torno a la Biblia. Una iglesia cristianesca se reúne cada semana para recibir empoderamiento y entretención. Sus servicios están más moldeados por la cultura pop o la preferencia personal que por la santa Escritura. Una iglesia cristiana predica la exclusividad de Jesucristo. Se hace eco de la Escritura al decir que Jesús es el camino, la verdad y la vida, y que no hay otro camino para reconciliarse con el Padre excepto a través de él. Una iglesia cristianesca insiste en que Jesucristo puede ser un camino pero no el camino, y más bien proclama que finalmente todos los caminos llevan al mismo destino. Una iglesia cristiana proclama la existencia del cielo y del infierno. Se aferra a la autoridad de la Biblia para rogar a las personas que se vuelvan a Cristo y se salven de la destrucción. Una iglesia cristianesca afirma una vida después de la muerte, pero niega la posibilidad del castigo eterno para aquellos que han escogido rechazar el ofrecimiento gratuito del evangelio. No hay nada en el mundo tan precioso como una verdadera iglesia cristiana. No hay nada en el mundo tan peligroso como una iglesia que es meramente cristianesca. Elige bien tu iglesia.