El significado de metáfora
La primera cosa que le diría a una persona que me pregunte, “¿Cómo podría interpretar la Biblia literalmente?” es “¿alguna vez has tenido el corazón roto? Y bueno, si esa persona tiene más de 15 años, su respuesta va a ser con seguridad siempre “sí”. Y luego yo les pediré que examinen qué quisieron decir cuando dijeron eso y que se den cuenta que no están relatando un paro cardíaco o una condición física del corazón. Están comunicando una verdad profunda a través de una metáfora. La Biblia está llena de esas metáforas. Jesús, en particular, fue un maestro de las metáforas. Es así como Jesús es el Buen Pastor, es la Luz del mundo, es la vid verdadera, el camino, la verdad y la vida, es la fuente de agua viva. Si solo leyeras las palabras de Jesús en la Biblia (como en una Biblia de letras rojas), tan solo enfocándote en las palabras de Jesús. Solo mira esas palabras y encontrarás metáfora tras metáfora. Encontrarás múltiples ocasiones en las cuales Jesús utilizó una metáfora y los oyentes interpretaron sus palabras literalmente y malinterpretaron completamente lo que Jesús quería decir.
Distinguir la diferencia
Así que a medida que nos acercamos a la Biblia, de la misma manera en la que nos acercamos a cualquier conversación o mensaje, necesitamos distinguir entre lo que es verdadero y lo que es literal porque estos no son intercambiables. Podría decirte que mi padre es un doctor en medicina. Estoy haciendo una declaración literal y resulta que no es cierta. O te puedo decir que Dios es mi padre y estoy haciendo una declaración metafórica, pero es una de las cosas más profundamente ciertas que te podría decir acerca de mí. Lo realmente emocionante acerca de las metáforas bíblicas es que a diferencia de mí o de cualquier otro ser humano, es que cuando intentamos elaborar una metáfora miramos a nuestro alrededor y pensamos, “Oh, esto se parece un poco a aquello”. Pero en cambio Dios empieza un paso entero antes. Él no mira a su alrededor y busca una cosa para compararla con otra, en realidad Él crea las metáforas. Un ejemplo de esto es la paternidad. Dios no miró a los padres humanos y dijo, “Oh, ellos realmente aman a esos niños y a esos adolescentes. Mi amor es algo parecido a eso, así que, voy a utilizar eso como una metáfora para expresar mi amor”. De hecho, Dios creo la paternidad para que nosotros pudiéramos tener un vistazo de su amor. Y si te tomas en serio las metáforas bíblicas, gran parte del entramado de nuestras vidas es en realidad una metáfora encarnada que nos ayuda a vislumbrar el amor y la gloria de Dios.
No excusen los pasajes difíciles
Algunas personas dirán, “Si comenzamos a tomar partes de la Biblia de manera no literal, ¿eso significa que podemos explicar todos los pasajes difíciles, las complejas enseñanzas de la Biblia? Absolutamente no. Jesús, por ejemplo dijo; “Entrad por la puerta estrecha, porque ancha es la puerta y amplia es la senda que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella”. Esta es una enseñanza extremadamente compleja y está expresada a través de una metáfora. Al mismo tiempo, los escritores del evangelio y los autores del Nuevo Testamento hacen grandes esfuerzos para dejar en claro que afirman que Jesús, literalmente, resucitó de entre los muertos: carne, huesos, heridas y todo. No hay manera de decir que esto fue tan solo un aumento metafórico que ocurrió en el corazón de sus discípulos. Así que, mientras debemos estar muy atentos a las metáforas de la Biblia, siempre que sea posible, tratando de leer la Biblia fielmente, entendiendo y tomando esas metáforas en serio, tampoco podemos usar esto como una excusa general para borrar cualquier parte de las Escrituras que nos parezca incómoda. Porque en realidad, muchas de las verdades incómodas se expresan a través de metáforas y también a Biblia es dolorosamente clara en una serie de otras verdades incómodas que debemos abordar literalmente.
Rebecca McLaughlin (PhD, Universidad de Cambridge) es cofundadora de Vocable Communications, una firma de consultoría y capacitación en comunicaciones. También es colaboradora habitual de Coalición por el Evangelio y previamente estuvo nueve años trabajando con los mejores académicos en el Foro Veritas, entidad que organiza foros en campus universitarios esto a través de conversaciones que buscan respuestas a las preguntas más difíciles de la vida.
