En algún momento entre mi generación y la actual, el noviazgo se volvió difícil, mucho más difícil de lo que una vez fue. Estoy seguro de que el llamado “movimiento de la pureza” tiene parte de la responsabilidad así como la cultura moderna de las citas. También la tienen la presencia generalizada de la pornografía y el auge de las redes sociales y las aplicaciones de citas. Lo que antes era relativamente sencillo, ahora parece que se volvió extrañamente complicado.
En su libro Pure [Puro], Dean Inserra recomienda un enfoque que denomina “noviazgo sin remordimientos”. Sugiere cuatro pautas sencillas y de sentido común que pueden ayudar a las parejas a salir sin vergüenza y sin remordimientos, tanto si se casan como si terminan la relación. He pensado en compartirlas contigo.

Deja de actuar como si estuvieras casado cuando no lo estás
Tendemos a ver las relaciones de noviazgo como semi-matrimonios en donde las parejas rápidamente, se enredan fuertemente en lo emocional, lo romántico e incluso lo físico. Pero “para el cristiano, si lo único que cambia cuando te casas es que empiezas a tener sexo, algo anda mal”. Cuando los cristianos le dan demasiada importancia a una pareja que está solo en un noviazgo, pueden estar realmente señalando que estas no son tan diferentes de las relaciones no cristianas: “Reflejan la idea que tiene el mundo de relaciones comprometidas a la ligera, declarando un supuesto matrimonio que Dios no reconoce”. Esto puede ser especialmente cierto cuando el novio intenta ejercer la autoridad espiritual en la relación como si un novio tuviera la autoridad y la responsabilidad de un marido. “La práctica, en cambio, debe ser la de dos individuos que se tratan como hermanos en Cristo, porque esta es la categoría en la que la Escritura los coloca como hombres y mujeres no casados. Así que, para resumir: mete el freno y relájate”. Asegúrate de que hay una clara distinción entre la relación de novio y novia, y la de marido y mujer, una distinción que es mayor que el sexo matrimonial.

Comunica las intenciones durante el noviazgo
Las parejas deben dar a conocer sus intenciones cuando empiezan a salir, ¡pero esto no es lo mismo que declarar la intención de casarse! Más bien, ser intencional es tener claro cuáles son las expectativas iniciales. “Me gustaría salir a una cita contigo este fin de semana”, es claro. “Vamos a salir y pasar el rato”, no lo es. Este tipo de claridad intencionada define la relación y así asegura que ambas personas tengan el mismo entendimiento y expectativa, pero tampoco carga la relación inmediatamente con el peso de un futuro matrimonio. Luego, a medida que la relación continúa, promueve una mayor claridad sobre los pasos que conducen más cerca del matrimonio.
El jugueteo sexual no es parte del juego
Aunque esto debería ser obvio y, de hecho, es obvio, aun así se viola muy a menudo. Pero de la misma forma que debemos abstenernos de las relaciones sexuales antes del matrimonio, también debemos abstenernos de todas las formas menores o preliminares de la sexualidad antes del matrimonio. “El sexo, el jugueteo sexual, la desnudez, etc., no son para las personas que están en un noviazgo, para los enamorados o para las personas maduras, sino para los casados. No hay que decirle adiós a las citas amorosas para entender esto. En la idea que el mundo tiene del noviazgo, se espera que haya sexo. Quitarlo como una opción inmediatamente en una relación de noviazgo prepara a un hombre y a una mujer a no tener remordimientos si finalmente ocurre una ruptura, ya que se trataron primero como hermano y hermana en Cristo”. Y quitar el sexo como una opción inmediatamente requiere quitar también todas las formas de sexualidad.

Date cuenta de que realmente no están comprometidos
Finalmente, las parejas deben entender que salir con alguien, incluso cuando es exclusivo, no exige un compromiso de por vida. Eres libre de terminar una relación amorosa y, de hecho, a menudo deberías hacerlo. Es el matrimonio el que debe ser permanente e inviolable, no el noviazgo. “¿Entonces, qué significa realmente comprometerse en una relación de noviazgo? Significa que estás comprometido hasta que uno de los dos decide que ya no lo está”. O, por supuesto, hasta que decidan casarse. Es el matrimonio, no el noviazgo, lo que establece la perpetuidad. Esto pone una responsabilidad no solo en la pareja, sino también en todos los demás. “Los cristianos casados deben tener esto en cuenta cuando caminan por la vida con otros creyentes que están en un noviazgo o que están comprometidos. Las citas son el tiempo para evaluar el carácter de otra persona, y la comunidad piadosa debe ser parte de eso, pero no debemos tratar a nuestros amigos que están en un noviazgo como si estuvieran casados o hacerlos sentir culpables por terminar una relación de pareja que no se dirige hacia el matrimonio. Qué triste si la comunidad de la iglesia es la razón por la que alguien siente que no puede legítimamente terminar una relación de noviazgo”. Por lo tanto, todos necesitamos tratar las relaciones de pareja con el tipo de informalidad que permitirá a las personas terminarlas fácilmente y sin vergüenza, si no están destinadas a estar juntas.

Voy a añadir una más y es la siguiente: diviértanse
He observado que muchas parejas cristianas se ponen demasiado serias muy rápidamente. Esto añade un gran peso durante una fase de la relación que debería ser ligera. ¿Por qué no pasar las primeras citas, las primeras semanas o meses, simplemente divirtiéndose y viendo si pueden disfrutar de la vida juntos? Deja claras las expectativas desde el principio (por ejemplo, vamos a tener una cita, no solo ir de paseo), pero por un tiempo deja de lado las conversaciones sobre el compromiso, el matrimonio y los hijos y comprueba si simplemente disfrutan el uno del otro. A medida que disfruten el uno del otro, las conversaciones más profundas empezarán a surgir de forma natural y en el momento adecuado.
En un contexto donde tener un noviazgo se ha vuelto demasiado complicado, tener pautas sencillas como estas puede ofrecer mucha ayuda y claridad. Puede ayudar a las parejas a sentirse seguras mientras salen y, lo mejor de todo, tener un noviazgo sin remordimientos.
Publicado originalmente en Challies.