
Tú, yo y la conferencia G3
Cuando la crítica reemplaza al compañerismo, hasta los mejores proyectos se desmoronan. Lo que ocurrió en G3 es un llamado de atención para todos.
Cuando la crítica reemplaza al compañerismo, hasta los mejores proyectos se desmoronan. Lo que ocurrió en G3 es un llamado de atención para todos.
Somos visionarios sin optimismo: profetizamos el dolor, no la gracia. Nos preparamos para la pena, pero rara vez para la bondad de Dios.
Es mejor sufrir la injusticia que dañar el testimonio de Cristo. Si ganas el pleito pero pierdes el carácter, ya perdiste todo.
A lo largo de la historia, los cristianos han aprovechado la tecnología para compartir el evangelio, y hoy los blogs ofrecen una forma de hacerlo
Dios no está limitado por el tiempo que has estado roto. Tu historia aún puede cambiar.
La muerte es el último enemigo. Frente a ella, un antiguo predicador nos invita a aferrarnos a la cruz. Su sermón entrelaza advertencia y consuelo
A quien mucho se le ha dado —incluso dolor y sufrimiento—, mucho se le exigirá. Las pruebas también son una mayordomía: oportunidades únicas para amar,
Nunca nos falta la belleza. Está en lo fugaz: en un amanecer, en un jardín que se marchita. Solo hay que abrir los ojos al
Tu cuerpo no te pertenece: es de Dios, creado y redimido por Él. Cuídalo, nútrelo y úsalo para su gloria. Si quieres correr para ganar,
Una sola persona que usa bien su don puede transformar una iglesia entera. Enseñar, servir, animar, cantar… todo cuenta cuando es para edificar a otros.
No desperdicies los días en que sientes poca necesidad de Dios. Son esos días los que preparan tu corazón para soportar la noche oscura. No
¿Quiénes son tus verdaderos amigos? No lo sabrás hasta que estar contigo les cueste algo. Lo mismo ocurre con Jesús.