Yo podría haber continuado mi educación. Si no fuera por Ben, podría haberme convertido en una misionera, una consejera o una lingüista. Si no fuera por Ben, podría haber tenido oportunidades de liderar, de influir, o quizás simplemente de disfrutar de una vida más fácil. En muchas maneras, Ben ha determinado el curso de mi vida: lo que hago, a dónde voy y a quién conozco. Si no fuera por Ben ¿dónde estaría ahora? Aún más importante ¿quién sería yo? Si no fuera por Ben, me habría perdido el milagro de ver cómo su vida cambiaba a los endurecidos y a los orgullosos. Me habría perdido ver cómo los «chicos malos» dejaban su coraza para tratarle con especial ternura. Me habría perdido mil actos de bondad tanto de niños como de adultos. Incluso habría echado de menos la asombrosa comprensión que le muestran los animales. Si no fuera por Ben, me habría perdido de ser testigo de cómo Dios eludía su limitada comprensión para soplar vida en su espíritu. Me habría perdido de ver su gozo desenfrenado en la adoración, en la comunión y en el bautismo. Si no fuera por Ben podría haber perdido la maravilla de la Navidad al igual que de las ranas y la leche con chocolate. Si no fuera por Ben nunca habría entendido el amor de la manera en que lo entiendo. Si no fuera por Ben nunca habría conocido a Dios como lo conozco. A través de Ben he aprendido lo profundo que es el amor de Dios por nosotros, que se basa simplemente en nuestra existencia, y no en nuestra actuación. El hecho de que algo sea difícil no significa que sea malo. Es simplemente difícil. Y en la economía de Dios, lo difícil siempre produce algo bueno. Gracias a Ben, he probado la gracia en lo difícil y la gloria en lo bueno. Si no fuera por Ben, mi vida habría sido diferente, sí, pero también más escasa. Ben me ha enseñado a ser más paciente, más pacífica y más agradecida Todos nosotros viajamos por desvíos de los caminos que creíamos que íbamos a recorrer. En un momento dado podría haber lamentado eso, si no fuera por Ben, que ha abierto mis ojos, mi corazón y mi mundo sólo por existir. Sí, sin Ben podría haber alcanzado más según los estándares del mundo, pero habría vivido menos. Mi vida habría sido más vacía, mi corazón más duro y mi fe más superficial, si no fuera por Ben.


Publicado originalmente en: https://andreasanborn.com/2020/09/01/if-not-for-ben/  Traducido por: Nedelka Medina 

Andrea Sanborn

Hola, soy Andrea. Soy esposa y madre adoptiva de una familia multirracial. También soy madre de un hijo adulto con capacidades cognitivas limitadas y una forma única de navegar por el mundo. Pero sobre todo soy una mujer que aprende día a día lo que significa amar y ser amada por su Creador. Escribo las cosas que necesito recordarme a mí misma. Escribo cosas que espero que muevan el espíritu hacia una devoción más profunda a Jesús. Escribo sobre cosas que a menudo se ocultan bajo el clamor y la angustia del mundo, donde la fe encuentra fundamento en la esperanza. Espero que lo que leas aquí te bendiga, como me bendice a mí escribirlo.

Artículos por categoría

Artículos relacionados

Artículos por autor

Artículos del mismo autor

Artículos recientes

Te recomendamos estos artículos

Siempre en contacto

Recursos en tu correo electrónico

¿Quieres recibir todo el contenido de Volvamos al evangelio en tu correo electrónico y enterarte de los proyectos en los que estamos trabajando?

.