Pensemos por un momento, que acaba de llegar un nuevo asistente a tu iglesia, llamado José, quien es un residente de la ciudad, de mediana edad, profesional y con muchas preguntas. José es nuevo en el evangelio, y hay muchas cosas que le desconciertan de las iglesias, pero los deseos de encontrar las respuestas a sus preguntas son más grandes. Él se pregunta cosas como: ¿quién es Dios?, ¿cómo sabemos que Él existe?, si Dios es real ¿cómo le podemos conocer? Y la más recurrente es: ¿cuál es el propósito de su existencia? Justamente estas son las respuestas que este breve pero conciso libro de Mez McConnell, Dios ¿está él ahí?, nos ayuda a responder, el cual es el primero de una colección que 9Marks ha pensado para responder a las grandes preguntas de la vida. El libro usa un personaje ficticio llamado Jack, para mostrar una situación que es muy común en nuestras iglesias: aquellas personas, nuestros vecinos, familiares o amigos, que buscan el sentido y propósito de sus vidas, lo que directamente debe llevarlos a Dios.
Organización del libro
Sus primeros dos capítulos nos muestran que existe un Dios, y que ese Dios se ha revelado a través de Su creación, pero también a través de Sus propias palabras escritas, porque como dice del autor “solo hay un lugar en el universo donde podemos descubrir información específica y verdadera sobre lo que Dios requiere de la raza humana: la Biblia” (pág. 24). Estos capítulos colisionan con el hombre moderno que cree que la ciencia tiene la respuesta a todo y que dice que la Biblia es un libro como un cuento de hadas, pero a la vez nos deja en claro que la Biblia es la única autoridad para decirnos lo que el evangelio es. Con esto, Jack ya comienza a despejar sus dudas. Los capítulos 3 y 4 responden la pregunta: ¿cómo es Dios? Estos capítulos nos ayudan a comprender la grandeza de Dios, y que solo luego de conocerle nos damos cuenta que Él es confiable y digno de ser seguido. En esta sección del libro se consideran otros atributos de Dios: Él es eterno, santo, Justo, no cambia, es autosuficiente a diferencia de nosotros. Pero también es cercano y trascendente, y nos podemos relacionar con él. Aquí, nuestro amigo Jack, comienza a cambiar su forma de pensar respecto de Dios. El capítulo 5 se titula: “Si Dios existe, ¿cómo se relaciona conmigo?”. Aquí se nos enseña por qué estamos en la tierra, estableciendo que es para adorar y obedecer a Dios, dándonos un propósito, a diferencia de la teoría de la evolución de Darwin, la cual hace la vida un sin sentido. Sin duda todos conocemos a alguien como Jack, que se encuentra solo y sin un sentido claro en su vida, ¡pero qué gozo que este hombre pueda conocer que su vida si tiene un propósito! El capítulo 6 se titula: “Si Dios existe, ¿qué le sucede a este mundo?”. Aquí se nos muestra cuál es el real problema de este mundo y sus habitantes: el pecado. McConnell comienza hablando acerca de la caída y los resultados de tan desastroso evento, que afectó en todo sentido a la raza humana. En relación a esto, el autor nos muestra la condición del hombre al decir que “el problema es que no creemos que merezcamos ser castigados porque no somos igual de malos que algunas personas” (pág. 72), pero al igual que Jack, debemos darnos cuenta de que nacimos siendo pecadores y que pecamos cada vez que tenemos la oportunidad. El capítulo 7 se titula: “Si Dios existe, ¿qué tiene que ver Jesús con Él?”. Luego de haber conocido el estado caído del ser humano, el autor nos lleva a la buena noticia de Jesús y Su obra, como el centro del conocimiento del evangelio. Sin duda, al igual que yo, usted se sentirá identificado con Jack al llegar a este punto en la lectura, por conocer que la cruz significa algo más que un amuleto, ya que en esa cruz hace más de dos mil años un inocente fue condenado por nuestro pecado. El último capítulo es titulado: “Si todo esto es verdad, ¿ahora qué hago?”. Esta ultima parte nos ayuda a entender que la Biblia deja en claro que nuestra salvación solo depende de la obra de Cristo, pero esta se obtiene solo por la fe que depositamos en Él, la cual nos lleva al arrepentimiento teniendo a Cristo como nuestro Señor. Jack ahora, está fascinado por descubrir el verdadero amor de Dios, y está listo para ser un seguidor más, que se conoce a sí mismo, pero que también conoce verdaderamente a Aquel que lo creó.
Conclusión
He disfrutado mucho la lectura de este libro, porque a lo largo de sus páginas el autor permanece bien cimentado en las Escrituras, pero sin dejar de ofrecernos un estilo moderno, y sobre todo muy práctico para ayudarnos en aquellos momentos en que llega a nuestra iglesia local un Jack, o para que nosotros mismos podamos comprender verdades fundamentales del evangelio. El libro me recordó mi propia historia: comienza respondiendo al escéptico, y termina con un nuevo cristiano convencido de rendirse ante aquel que dio Su vida en la cruz por mí. Más información sobre el libro Dios, ¿está el ahí? –> Aquí